La globalización y la internacionalización han permitido romper muros y han facilitado la conectividad entre rincones de todo el mundo, pero han comportado, a la vez, un desbordamiento de la oferta. Y frente a tanta oferta, la gestión del talento se ha convertido en el centro de la ecuación si queremos dirigir nuestra compañía de una manera sostenible y exponencial, lo que deja al descubierto la necesidad de transformar las organizaciones. Pero ¿qué significa transformar una organización? Transformar es, como nos comenta Sergi en el vídeo, «saber empujar a todos hacia unos valores comunes».
Peter Drucker ya remarcaba la importancia de tener unos valores y principios que sustenten la organización. Y es que, como bien decía, «la cultura empresarial se come la estrategia para desayunar»; porque una buena estrategia sin la existencia de valores comunes tendrá vida, sí, pero corta; y con un mañana sin futuro. Y es en este punto donde entra en juego el papel del líder. El liderazgo impacta directamente en la cultura de la organización, ya que en él recae la tarea de transmitir e impregnar al equipo de los valores y principios de la empresa, de hacer que el grupo se sienta parte de la organización y de favorecer el efecto del engagement, es decir, la implicación directa del trabajador en lo que hace.
La cultura empresarial se come la estrategia. Y en el líder recae la misión de transmitir y saber empujar a todos hacia unos valores comunes.
¿Cómo debe ser un buen líder? Sergi Garcia lo agrupa perfectamente en dos grandes puntos:
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- 1) Debe dar visión y guiar al equipo y 2)Debe desarrollar y hacer crecer este equipo. Así pues, un líder debe reforzar el propio poder personal, facilitar la proactividad y, en definitiva, guiar hacia el propio desarrollo personal y profesional. Ser un buen líder, comenta, no depende del territorio, sino de que el líder guíe al grupo con valores de respeto y aprendizaje.
Hasta hace unos años, puede que ser un buen líder, implicara tener mucho conocimiento sobre un sector y ser el «mejor» en él, pero a día de hoy es necesario explorar nuevas modalidades de liderazgo. Modalidades que nos permitan dar respuesta a las realidades actuales del trabajo: la diversidad cultural, la complejidad, la tecnología y el teletrabajo y la innovación, entre otras. Es necesario un liderazgo auténtico, remoto, transcultural y solidario. Un liderazgo que fomente la autodirección, que aporte conocimiento y permita, al mismo tiempo, recibirlo.
Para nosotros, siguiendo la línea de lo expuesto por Sergi a lo largo de toda la entrevista, ser líder significa tener la capacidad de aprender de tu equipo, ser capaz de crear un clima de confianza que permita la inserción de la diversidad de pensamientos y de oportunidades, y así dar lugar a la aparición de la creatividad y la innovación que permiten al grupo brillar y convertirse en un auténtico equipo. Podríamos concluir que ser un buen líder es rodearse de los mejores profesionales y darles autonomía y espacio para que se sientan parte del proyecto.
Para vosotros, ¿qué significa ser líder?
